Ha sido un placer compartir contigo la historia, secretos y magia de la ciudad, esperamos sinceramente que hayas disfrutado tanto como nosotros.
Como hemos dicho durante el tour, la gastronomía es una parte vital de cualquier cultura, y en Salamanca, la comida es un nexo de unión. Aunque hemos compartido contigo algunos lugares y platos durante el tour, queremos dejarte una lista más detallada de nuestras recomendaciones personales.
Ten en cuenta que todos los sitios que mencionamos son lugares que nos encantan de verdad; ninguno de ellos paga por estar en esta lista. Son sitios donde incluso podríamos encontrarnos disfrutando de una comida o un buen vino, ya que forman parte de nuestra rutina en Salamanca.
¡Esperamos que los disfrutes tanto como nosotros!
Conviértete en un auténtico salmantino a través de la gastronomía
Café y montadito o tortilla rellena en Las Caballerizas:
Ubicado en las históricas caballerizas del Palacio de Anaya, este acogedor café es muy querido tanto por locales como por estudiantes. La tortilla rellena, una versión moderna de la clásica tortilla española, es una de las tapas más típicas, así como el montadito de jamón. Combínala con un café, una caña o un vino (a veces tienen Dominio del Bendito… ¡mi favorito!), y disfruta del ambiente relajado y académico que hace de esta cafetería un lugar icónico entre los estudiantes universitarios.

Patatas meneás en Café Rúa o el Bar Edelweis:
Ideal para los días fríos, las patatas meneás son un plato imprescindible en Salamanca. Esta receta tradicional mezcla puré de patatas con ajo, pimentón y trozos crujientes de panceta. Es una comida humilde pero llena de sabor. Si bien no son exclusivas de esta provincia, son sin duda uno de los platos más típicos de la región charra. También se conocen como patatas de herradero, ya que eran la comida habitual de la faena con el mismo nombre, propia de las fincas ganaderas que abundan en la dehesa salmantina. El herradero consiste en marcar el ganado con un hierro candente, imprimiéndole sobre la piel el sello indeleble de cada ganadería.
Suele servirse como tapa en bares como los de la icónica Rúa Mayor. Sin duda, una joya de la gastronomía local.

Chanfaina en Casa Vallejo:
En la Hostería Casa Vallejo puedes disfrutar una de las mejores versiones de la chanfaina en Salamanca. Este plato tradicional, hecho con arroz, cordero y una mezcla de especias, ha sido un pilar en la gastronomía local durante generaciones. Situado cerca de la Plaza Mayor, este histórico restaurante ha perfeccionado los sabores reconfortantes de la cocina local, convirtiéndose en un lugar imprescindible para los locales. Suelen tener también otros platos típicos de Salamanca… ¡y todos riquísimos!

Brocheta de morucha en La Aldaba:
Este bar-restaurante es conocido por su dedicación a los productos locales, La Aldaba se especializa en carne de morucha, una raza de ternera autóctona que destaca por su sabor y su suave textura. La brocheta de morucha es un imprescindible en la Aldaba, con tiernos trozos de esta deliciosa carne. Combínala con un buen tinto de Toro o un Ribera crianza para sacarle todo el partido a los sabores. En el restaurante podéis también disfrutar de un buen chuletón de esta ternera y productos locales de primera calidad.

Croquetas y un buen vino en Café Dominicos:
Ubicado cerca del convento de San Esteban (Los Dominicos), el Café Dominicos ofrece una fantástica variedad de platos caseros. A nosotros nos flipan sus croquetas. Desde las tradicionales de jamón hasta opciones más atrevidas como las de puerros confitados con zanahoria, hay para todos los gustos. Combínalas con un buen vino de su cuidada selección y disfruta del ambiente acogedor y las vistas privilegiadas. Pregunta a Adrián, el encargado, por recomendaciones de vino; ¡contagia con su pasión y conocimiento!. Y dale recuerdos de Miguel, de Salamanca Guiada 😉

Revuelto de farinato en El Bardo or Casa Paca:
El farinato, un embutido típico de Salamanca, combina manteca o grasa de cerdo, pan, harina, pimentón, cebolla, ajo, sal, anises y aguardiente. Su sabor intenso puede ser un poco abrumador para quienes lo prueban por primera vez, por lo que el revuelto de farinato (huevos revueltos con este embutido) es una excelente manera de disfrutarlo de forma equilibrada.
Para los más atrevidos, los huevos rotos con farinato (huevos fritos con patatas y farinato) son otra forma deliciosa de saborear este manjar local.

En El Bardo, a pocos pasos de la Casa de las Conchas, encontrarás cocina tradicional salmantina a precios asequibles. Este restaurante suele estar lleno, reflejo de su popularidad entre locales y visitantes. Su revuelto de farinato es una introducción perfecta a los sabores intensos de este embutido, ofreciendo una comida satisfactoria en un ambiente animado. Además de los pinchos de la barra, echad un vistazo a la carta de tapas, ¡tienen opciones riquísimas!
Por otro lado, Casa Paca, uno de los establecimientos más emblemáticos de Salamanca, combina recetas tradicionales con alta gastronomía. Su versión del revuelto de farinato refleja este equilibrio, ofreciendo una experiencia sofisticada pero auténtica.
Jeta en La Viga:
Fundado en 1945, La Viga es un bar de tapas mítico en Salamanca, ahora bajo nueva dirección que ha sabido conservar su encanto local y auténtico. Conocido por su jeta asada (careta de cerdo al horno), este animado lugar mantiene el espíritu de una taberna tradicional, ofreciendo platos regionales asequibles y riquísimos. A menudo llena de locales, la atmósfera hace de este bar una parada obligatoria para quienes buscan experimentar la herencia culinaria de la ciudad.
Cuando familia o amigos visitan la ciudad, ¡esta es una parada imprescindible para nosotros!

En La Viga también podrás probar otros platos típicos, como las chichas (o probadura, la carne que se mete en chorizos y salchichones, pero sin curar y a la plancha), el morro rebozado (mi perdición…) e incluso chanfaina, de la que ya hemos hablado.
Patatas Bravas en El Segundo:
El Bar Segundo es una visita imprescindible para quienes quieran probar unas de las mejores patatas bravas de Salamanca. Famoso por su salsa brava, que añade un toque picante y sabroso a las crujientes patatas, este pequeño bar ofrece generosas raciones a precios asequibles, lo que lo convierte en un lugar muy popular entre los estudiantes. Situado en la Plaza de San Juan Bautista, el Bar Segundo es un pilar de la escena de tapas de Salamanca.

Paloma en Mesón Cervantes:
La paloma es una tapa típica de Salamanca, servida sobre cuero crujiente, una base de trigo frito que le da su textura. Coronada con ensaladilla rusa, el contraste entre la ensalada cremosa y el cuero crujiente la convierte en un imprescindible para quienes exploran los sabores locales.
Un buen lugar para probar esta delicia es el Mesón Cervantes, un icónico destino para los amantes de las tapas, ubicado en pleno corazón de la Plaza Mayor. Con una amplia variedad de tapas tradicionales y modernas, este es el sitio ideal para disfrutar de la auténtica gastronomía salmantina. Si buscas una comida más sustanciosa, puedes sentarte junto a una de las ventanas y disfrutar de un almuerzo o cena mientras contemplas las impresionantes vistas de la Plaza Mayor.

Garbanzos de la Armuña en Vinodiario:
Los garbanzos de la Armuña, una variedad apreciada de la región de Salamanca, son conocidos por su pequeño tamaño y textura suave y mantecosa. Estos garbanzos locales, celebrados por su sabor y calidad, son un ingrediente básico en los platos tradicionales.
Un excelente lugar para probarlos es Vinodiario, un acogedor bar de vinos que combina excelentes vinos locales con platos preparados cuidadosamente. Su versión de garbanzos de la Armuña muestra la versatilidad y riqueza de este humilde ingrediente, servido como tapa o como ración. Ubicado en la Plaza de los Basilios (muy cerca de Café Dominicos) Vinodiario es conocido no solo por su comida, sino también por su ambiente relajado y su amplia selección de vinos, lo que lo convierte en un lugar perfecto para disfrutar de una tarde tranquila con grandes sabores.

OTROS PRODUCTOS QUE TIENES QUE PROBAR EN SALAMANCA
Embutidos ibéricos:
Salamanca es famosa por sus embutidos ibéricos, un testimonio de las ricas tradiciones culinarias de España. La provincia, especialmente la región de Guijuelo, produce algunos de los jamones ibéricos, chorizos, lomos y salchichones de mayor calidad del país. Hechos de cerdos ibéricos y muchos alimentados sólo con bellotas (los que tienen el apellido «ibérico de bellota»). Pero también en la Sierra de Francia hay grandes productos ibéricos.
El jamón ibérico, el más preciado, se cura durante al menos 36 meses, desarrollando sabores profundos y complejos. El chorizo ibérico, sazonado con pimentón, tiene un sabor ahumado y en algunas ocasiones ligeramente picante. El lomo ibérico, un corte tierno del lomo, se condimenta con ajo y pimentón, mientras que el salchichón, una salchicha curada más suave, se sazona con pimienta negra.
Estos embutidos son un símbolo de la herencia gastronómica de España y un verdadero placer para el paladar.

Hornazo:
El hornazo es uno de los platos más icónicos de Salamanca, tradicionalmente consumido en el Lunes de Aguas, una festividad que data del siglo XVI (o quizá antes, pero eso te lo contamos en la visita).
Esta especie de empanada está rellena de lomo de cerdo y chorizo y en ocasiones huevos duros y/o jamón. Como todo buen plato tradicional, hay tantas recetas como personas lo hacen. La masa es clave, ya que se hace con harina, grasa de cerdo y vino (entre otros ingredientes) para darle un toque único.
Podéis probarlos en muchos sitios, aunque no todos son igual de ricos. En la Tahona Delicatessen y La Madrileña tienen los únicos hornazos con “marca de garantía”. A nosotros nos encanta el hornazo de Adypa Mata o el de la Hornazería. Y si queréis probar un hornazo diferente, a nosotros nos encantan los de La Carnicería de Salamanca: tanto el de masa de hojaldre como el de masa dulce.

En la zona centro, mi lugar preferido para comprar un buen hornazo es sin duda La Industrial (C/ Rúa).
Perronillas:
Las perronillas (o perrunillas) son galletas tradicionales, amadas por su textura desmenuzable que se derrite en la boca. Hechas con ingredientes simples como harina, manteca de cerdo, azúcar y, a veces, aromatizadas con canela o anís, estas galletas forman parte de las tradiciones rurales de España desde hace siglos. Son perfectas para acompañar un café o vino dulce, ofreciendo un bocado del encanto rústico de la repostería regional.

Esta preciosidad y deliciosidad de perronillas son de Artesanos Panaderos Moreno y son, con diferencia, nuestras favoritas. Por ahora sólo las venden en el Barrio del Oeste. Estamos intentando que las vendan en el centro… ¿Nos ayudáis pidiéndoselo también por Instagram? 😛
Por el centro podéis comprar unas buenas perronillas también en La Industrial.
Bollo maimón:
El bollo maimón es un bizcocho único de Salamanca, a menudo preparado para ocasiones festivas como bodas o bautizos. Este esponjoso bizcocho en forma de anillo se elabora con harina, azúcar y huevos, y suele aromatizarse con ralladura de limón. Caracterizado por su textura ligera y aireada, a veces se sirve acompañado de natillas o cremas dulces.
Nuestra recomendación: ¡tomarlo SIEMPRE con un vaso de leche, café o similar!

Este es también de nuestro panadero favorito, Artesanos Panaderos Moreno. Pero es difícil encontrarlo en Salamanca. Mientras nos ayudáis escribiéndole por Instagram para que venda sus productos en el centro, podéis encontrar un bollo maimón muy rico en La Industrial.
¡Brinda con estilo! La guía definitiva para disfrutar de las mejores bebidas de Salamanca
Para amantes de la cerveza:
Uno de los lugares favoritos de Salamanca Guiada, The Holy Cross es un auténtico pub irlandés en pleno corazón de la ciudad. Famoso por su servicio amable y su ambiente acogedor, este pub ofrece mucho más que una excelente pinta de Guinness. Los amantes de la cerveza estarán encantados con su selección rotativa de cervezas artesanales locales, convirtiéndolo en una parada imprescindible para explorar la escena cervecera salmantina. No dudes en pedir recomendaciones al personal, siempre dispuestos a ayudarte. Además, si tienes hambre, cuentan con una selección de comida típica de pub para acompañar tu bebida. Perfecto para una noche relajada y sin prisas.

Otra excelente opción para disfrutar de una buena cerveza, The Irish Corner ofrece un ambiente relajado y una sólida variedad de cervezas locales e internacionales. Ya sea que te decantes por una clásica lager o te atrevas con algo nuevo, disfrutarás del ambiente acogedor de este popular pub. Es el lugar ideal para pasar una velada tranquila y es un favorito tanto entre locales como viajeros.

Para cócteles y copas:
Si te apetece una copa creativa, Hernández y Fernández es el lugar perfecto. Este bar, con su ambiente divertido y original, es conocido por sus vibrantes cócteles y su buen rollo. Ideal para una noche de risas y copas con amigos.

Para quienes prefieren un rincón tranquilo donde disfrutar de una copa, Capitán Haddock es una apuesta segura. Este acogedor bar, con su temática marítima, ofrece un ambiente relajado y sereno, perfecto para desconectar después de un día explorando Salamanca. A diferencia de otros bares más bulliciosos, aquí encontrarás un refugio donde disfrutar de tu copa en calma. Ya sea solo o acompañado, este lugar es ideal para una velada tranquila.
Otro de los favoritos de Salamanca Guiada, Café Niebla es una coctelería galardonada, conocida por sus bebidas preparadas con maestría. Las noches de jazz en vivo los jueves añaden un toque especial al ambiente acogedor, creando el escenario perfecto para disfrutar de un cóctel único. Con premios nacionales e internacionales en su haber, Café Niebla es una parada obligada para quienes buscan los mejores cócteles de Salamanca.


¡Salud!
Y, recuerda…
si quieres seguir disfrutando en tus viajes conociendo las ciudades a fondo, como has hecho con nosotros…
guárdate la web de «La Red de Guías de Confianza«.
Garantía de que vas a disfrutar de las visitas.