El cementerio de Salamanca guarda más que nombres y fechas. Entre sus paseos silenciosos se esconde parte de la memoria de la ciudad, de sus costumbres y de su forma de entender la muerte. En los últimos años, el interés por conocer estos espacios desde una mirada cultural ha crecido: el llamado necroturismo o turismo de cementerios.
Salamanca Guiada creó en 2024 la visita Salamanca de Muerte precisamente para responder a esa demanda. No como una curiosidad morbosa, sino como una oportunidad para descubrir el patrimonio inmaterial, los ritos y las creencias populares que siguen presentes en la cultura salmantina.

Historia del cementerio de Salamanca
El actual cementerio de San Carlos Borromeo se inauguró en el siglo XIX, tras varios intentos frustrados de sacar los enterramientos fuera del casco urbano. Hasta entonces, los salmantinos eran sepultados en iglesias y conventos, una costumbre que cambió con las nuevas normas sanitarias de la época.
Desde entonces, este espacio se convirtió en el principal lugar de descanso de la ciudad, y hoy reúne entre sus muros una auténtica historia en piedra: esculturas funerarias, panteones familiares y lápidas que reflejan la evolución social, artística y religiosa de Salamanca.
Más allá de la historia: símbolos y curiosidades
Recorrer el cementerio de Salamanca con calma permite descubrir una rica simbología: cruces, ángeles, coronas, ramas de olivo o calaveras que, lejos de ser macabras, hablaban de esperanza, fe o redención.
También aquí reposan figuras destacadas de la ciudad, como el médico Filiberto Villalobos ,el cantante Rafael Farina o, por supuesto, Don Miguel de Unamuno Incluso se conservan elementos únicos, como el crucero de San Cebrián o la fosa común, testigos de épocas difíciles y del paso del tiempo.
Y si levantas la mirada, las vistas de la ciudad de Salamanca convierten este lugar en un auténtico mirador de la memoria.
Una visita cultural diferente
No somos los únicos que mostramos este espacio al público —el Ayuntamiento de Salamanca también organiza visitas gratuitas—, pero Salamanca Guiada va un paso más allá.
No nos limitamos a enumerar panteones ni a repetir lo que dicen los paneles, sino que ofrecemos una visión global que conecta la historia con la cultura tradicional, los ritos funerarios, los refranes, las supersticiones y la memoria popular que todavía late en la ciudad.
En la edición de 2024 contamos con Juan Francisco Blanco, uno de los mayores expertos en patrimonio inmaterial de Salamanca y reconocido divulgador de la tradición oral, cuya mirada ayuda a entender los ritos, símbolos y relatos que han dado forma a nuestra cultura funeraria.
Es una manera de acercarse a la muerte sin morbo: con respeto, curiosidad y sentido cultural

Fechas y cómo participar
La visita Salamanca de Muerte regresa este octubre con dos pases especiales, el domingo 19 y el jueves 30 a las 17:00 horas.
Las plazas son limitadas y se recomienda reservar con antelación.👉 Si la demanda lo permite, podrían abrirse nuevas fechas en noviembre.
El precio es de 12 €, e incluye radioguías e impuestos.
Una experiencia para mirar la ciudad con otros ojos
Visitar el cementerio de Salamanca no es solo recorrer tumbas: es adentrarse en la historia íntima de la ciudad, en sus miedos, sus esperanzas y sus costumbres.
En Salamanca de Muerte, esa mirada se amplía: desde los símbolos hasta las historias que se contaban al calor del hogar, desde los refranes antiguos hasta la memoria colectiva que todavía acompaña a los vivos.
Una invitación a mirar Salamanca desde el silencio, con respeto, curiosidad y emoción.
Por Miguel Blanco, guía oficial de turismo en Salamanca y creador de Salamanca Guiada.


